22 marzo 2019 | 11:30 am Por: Edwin Ramos

Apuntó el economista Manuel Lajo

Importadores obtuvieron grandes ganancias con la importación de trigo, pero no trasladaron ese beneficio al consumidor local

Importadores obtuvieron grandes ganancias con la importación de trigo, pero no trasladaron ese beneficio al consumidor local

Especialista sostuvo que países que proveen del cereal al Perú como Estados Unidos cuentan con altos subsidios para sus productores. El 90% del trigo usado en el mercado peruano sería importado.

(Agraria.pe) El estado actual del mercado de varios alimentos que se producen en el país tiene que ver mucho con el año 2007. Según el economista Manuel Lajo fue ese momento, durante el segundo gobierno del expresidente Alan García, que se inició una reforma que prácticamente desmanteló los aranceles no solo en el sector agrícola, sino en toda la economía. 

Esa línea fue seguida aún después de este periodo y se consolidó en 2015, cuando se baja dramáticamente la franja de precios al maíz, azúcar y la leche, lo que, en cálculos del especialista, habría permitido a los importadores ahorrarse hasta US$ 180 millones en el pago de derechos ese año.

A pesar de que en ese trayecto de tiempo, si bien hubo altibajos propios del mercado internacional, los precios tendieron a bajar para las empresas importadoras, estas no trasladaron ese precio al consumidor, sino que lo aprovecharon para incrementar sus ganancias, las que entre 2008 y 2010 habrían alcanzado cimas extraordinarias. 

Lajo considera que este estado de cosas explica en buena parte porqué la producción nacional de trigo está estancada en 200 mil toneladas desde hace varios años. Y es que, argumenta, la industria prefiere importar y solo adquiere el producto nacional en niveles marginales. Así, en ya en 2013 el país importó trigo por US$ 568 millones. Hoy el 10% del trigo que utiliza el mercado peruano para fabricar fideos, harinas, panes y otros similares, es nacional y el 90% es importado. 

“¿De dónde lo traen? De Argentina viene un 16%, de Estados Unidos un 25%, de Canadá un 4%. También viene un poco de Rusia y Paraguay, pero Argentina, Estados Unidos y Canadá son básicamente los que nos proveen de trigo y son los interesados en que  haya consumo en el Perú”, detalla. 

Agrega que es necesario analizar la composición de la producción del cereal en Estados Unidos especialmente, donde hay años como el 2004 en que los subsidios a los productores representaron hasta un 77% del precio que recibieron en chacra. Sin duda, una situación inequitativa de competencia frente a la producción nacional.

Dato

Manuel Lajo dio estas declaraciones durante su participación en un reciente foro sobre el impacto de las políticas arancelarias en el sector agrícola organizado por Conveagro.