COLUMNA DE:
Fernando Cillóniz

Fernando Cillóniz

Presidente de la consultora Inform@cción
16 agosto 2023 | 10:13 am Por: Fernando Cillóniz

Balance semestral agrario 2023

Balance semestral agrario 2023

La agricultura frutícola de exportación de la Costa – excepto los arándanos y las mandarinas – también viene creciendo: uvas de mesa, paltas, mangos y demás. Más bien… ¡mucho ojo! Nos estamos excediendo en cuanto a nuevas plantaciones de frutas de exportación. Los mercados mundiales de frutas frescas están creciendo, y seguirán creciendo, pero no al ritmo de crecimiento de la oferta peruana.

A propósito del solsticio de invierno, que en el hemisferio Sur ocurre el 24 de junio de cada año, haré un balance de lo acontecido en el sector agrario en la primera mitad del año.

Dicho sea de paso, el solsticio de invierno – el día del año en que el sol se encuentra a mayor distancia de la Tierra – fue motivo de inspiración para la celebración de la ancestral y majestuosa fiesta del Inti Raymi en el Cusco, y en otras regiones de nuestro país.

De la misma manera, el 24 de junio, día del nacimiento de San Juan Bautista, nuestra Amazonía – toda ella – festeja a lo grande la célebre fiesta de San Juan.

Ambas fiestas – el Inti Raymi y San Juan – tienen una alta connotación rural, y, por ende, agraria. Por ello las traigo a colación, en este balance semestral agrario.

Una nota previa. La agricultura en el Perú – y en el mundo – es estacional. Las mayores cosechas agrícolas de la Sierra se concentran más en los primeros meses de cada año. Lo mismo ocurre con el arroz y el algodón en la Costa. La caña de azúcar se cosecha todo el año. Mientras que el café y el cacao de la Selva alcanzan sus picos de exportación entre los meses de setiembre y diciembre.

Las cosechas y exportaciones frutícolas de la Costa también tienen sus estacionalidades. Las uvas de mesa y mangos, al ser frutas de verano, alcanzan sus picos de exportación entre los meses de noviembre y febrero. Es decir, se “montan” sobre el cambio de año calendario. Los arándanos se exportan más entre los meses de setiembre y noviembre. Mientras que las paltas y mandarinas, que son frutas de invierno, se exportan más en esta época del año, entre junio y setiembre.

Dicho esto, empecemos por lo más importante para el agro: el agua. El 2023 arrancó – por todo lo alto – como un buen año de agua. Las lluvias de verano, gracias a Dios, fueron abundantes. Los huaicos y el Ciclón Yaku dieron cuenta de la gran cantidad de agua que Dios nos mandó, entre enero y abril pasados. Gracias a ello, los reservorios se llenaron. Y con esas aguas almacenadas, completaremos la campaña agrícola 2023, sin mayores problemas.

Por todo ello, la producción agrícola creció en el primer semestre del 2023. O sea, al revés de lo que pregonaron ciertos agoreros apocalípticos, entre los que se encuentra el propio Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (MIDAGRI), que dijeron que por falta de agua, la producción alimentaria iba a colapsar. Más bien, gracias al agua que tuvimos, la producción de papa, maíz, caña de azúcar, algodón, cacao, etc., aumentó este primer semestre 2023. El único cultivo importante cuya producción ha caído es el café.

La agricultura frutícola de exportación de la Costa – excepto los arándanos y las mandarinas – también viene creciendo: uvas de mesa, paltas, mangos y demás. Más bien… ¡mucho ojo! Nos estamos excediendo en cuanto a nuevas plantaciones de frutas de exportación. Los mercados mundiales de frutas frescas están creciendo, y seguirán creciendo, pero no al ritmo de crecimiento de la oferta peruana. 

La buena noticia fue que la urea volvió a su precio normal. Lo mismo que el petróleo y derivados, con lo cual bajaron los fletes. No obstante, seamos sinceros. Hay también errores propios que merecen ser resueltos. El sobreendeudamiento bancario… por ejemplo. Sobre todo ahora que las tasas de interés han subido en todo el mundo. ¡Mucho cuidado con ello!

Por otro lado, la seguridad personal y patrimonial implica cada vez mayores costos. La delincuencia y robos de agroquímicos son cada vez más frecuentes y violentos.

En síntesis. Buen año de agua. Año de altas tasas de interés bancarias. Año de buenos precios para algunos cultivos tradicionales: caña de azúcar, arroz y maíz, principalmente. Pero bajos precios – sobre todo el año pasado – para paltas, mandarinas, granadas, arándanos, entre otros. Tanto que algunas empresas sufrieron pérdidas significativas en sus estados financieros. Por ello, habrá ventas de empresas, cambios de propietarios, remates de activos, y movidas por el estilo.

Ahí va mi balance agrario de este 2023, que está en curso.

Fuente: voxpopulialdia