12 marzo 2019 | 09:42 am Por: José Carlos León Carrasco | jcleon@agraria.pe

Indicaron gremios asociados de AGAP

De prohibirse importación de agroquímicos genéricos, agricultura peruana perdería competitividad y paralizaría su desarrollo

De prohibirse importación de agroquímicos genéricos, agricultura peruana perdería competitividad y paralizaría su desarrollo

Los agroquímicos representan el 14% de la estructura de costos de producción, sin embargo de eliminarse la ley que permite la importación directa, un efecto inmediato sería el incremento de este costo en 23%.

(Agraria.pe) De prohibirse la importación directa de agroquímicos genéricos, la agricultura peruana en general perdería competitividad y paralizaría su desarrollo, ya que dichos productos representan un porcentaje importante en la estructura de costos, indicó la Asociación de Gremios Productores Agrarios del Perú (AGAP).

El gremio señaló que las casas comercializadoras de agroquímicos han solicitado al Tribunal Constitucional que declare inconstitucional el artículo 3 de la Ley N° 30190 (dictada en abril del 2014) -que permite la importación directa de agroquímicos genéricos (no sujetos a patentes) a precios internacionales- aduciendo que contraviene a la Norma Andina para el Registro y Control de Plaguicidas Químicos de Uso Agrícola (denominada ¨Decisión 436¨), sin embargo AGAP indica que la normativa de la Comunidad Andina fue derogada.

“Lo que quieren las casas comerciales de agroquímicos es retornar  a condiciones de oligopolio donde estas empresas controlaban la importación de agroquímicos en el Perú y establecían precios muy por encima del mercado”, indicó Carlos Zamorano Macchiavello, gerente general de la Asociación de Productores de Uva de Mesa del Perú (Provid) y director ejecutivo del Instituto Peruano del Espárrago y Hortalizas (IPEH).

Detalló que con la ley, los agroquímicos representan el 14% de la estructura de costos de la producción, sin embargo de eliminarse la ley un efecto inmediato sería el incremento del costo de producción en 23%, lo que afectará la competitividad y la posibilidad de ingresar a los más diversos mercados del mundo.

A modo de ejemplo, dijo que en 2011 en nuestro país un plaguicida genérico como el Buprofezpin, era comercializado por las empresas de agroquímicos a US$ 31.75, cuando el precio internacional ascendía a US$ 6.00 (en 2018 ascendió a US$ 7.37). Igual panorama se observa con el Acetamiprid que en 2011 tenía un precio comercializado por los laboratorios de agroquímicos de US$ 158.73, mientras que en el mercado internacional estaba valorizado en US$ 13.10 (en 2018 el precio era de US$ 10.48).

La Libre competencia hace que el precio se regule
Por su parte, el gerente general de la Asociación de Productores de Cítricos del Perú (ProCitrus), Sergio del Castillo Valderrama refirió la diferencia de precios de los plaguicidas que se comercializaban en Perú con el resto de los países de la región hasta 2014. 

“Hasta antes de la promulgación de la Ley N° 30190 en nuestro país se comercializaba un producto agroquímico con un precio de hasta 2.7 veces más que en países como Ecuador, Chile y Bolivia. Esta ley generó una libre competencia, lo que hizo que se regule el mercado y el precio bajo”, sostuvo.

Sergio Del Castillo destacó que los agroquímicos son el segundo rubro de mayor costo en la estructura de precios, siendo superado solo por el costo de la mano de obra. 

Agregó que los argumentos utilizados por las casas comercializadoras para indicar que la Ley N° 30190 es inconstitucional no tienen ningún asidero ya que el uso de agroquímicos genéricos no representan ningún riesgo para la salud y el ambiente porque incluso están más regulados que los productos que comercializan los laboratorios en una casa comercial.

Explicó además que las casas comercializadoras de agroquímicos una vez que sacan un registro importan libremente y no realizan ningún control con los productos vendidos, por el contrario cada lote de agroquímicos genéricos que importan directamente las empresas o asociaciones son analizados (qué se importará, para qué se importará, qué dosis se va usar, dónde se almacenará el producto, se debe tener una orden para desaduanar el producto y se verifica en campo la utilización de los mismos), asimismo, deben recoger los envases de los agroquímicos utilizados, aplicar el triple lavado, perforación y destrucción del envase.

Agroexportadoras están obligadas a tener certificaciones sobre buen uso de agroquímicos
A su turno, el gerente general de la Asociación de Productores de Palta Hass del Perú (ProHass), Arturo Medina Castro, destacó que las empresas agroexportadoras  están sujetas a las normas de los mercados de destino y de los clientes, donde consideran mucho el buen uso de los agroquímicos, respeto a los límites máximos de residuos, curva de degradación, disposición final de los envases, entre otros.

“Las agroexportadoras tienen muchas certificaciones sobre el buen uso de plaguicidas y eso porque los importadores nos obligan a tenerlo, lo que nos lleva a usar bien los productos, que no tengan problemas con residuos al llegar al mercado por lo que nos preocupamos mucho por la calidad de los agroquímicos que importamos”, manifestó.

Dato

. Del total de agroquímicos que ingresan a nuestro país, el 95% es importado por las casas comerciales y el 5% por las empresas y asociaciones agrarias. Las ventas de agroquímicos en nuestro país ascienden a US$ 200 millones al año.